Reducir la orientación parcial o sesgo inconsciente en la contratación para tus franquicias

marzo 16, 2018 12:00 am Publicado por

La selección de franquiciatarios es un proceso complejo que implica varias etapas y varía con base en muchos factores incluyendo el tamaño de la red de la franquicia. Sin embargo, la fase de entrevista es una etapa obligada para todos los franquiciatarios. Esta etapa puede fácilmente volverse tediosa y complicada si no estás bien preparado para ella: recibir solicitudes, revisar currículos, clasificar, calificar, entrevistar, evaluar candidatos… ¡qué cosa! Con tanto que hacer al mismo tiempo y teniendo a veces hasta cien solicitudes que revisar, hay detalles que pueden escaparse a tu atención y que sin embargo son cruciales para el futuro de tu marca y de tu red de franquicias.

Una mala contratación puede costarle a la compañía de 1.5 a 5 veces el salario anual de un empleado.[1] ¡Imagina el daño que puede hacerle a tu red de franquicias! ¿Cómo asegurarte de que las entrevistas se llevan a cabo de la manera más eficiente posible? Hay varias formas de lidiar con esto y por eso decidimos abordar este tema desde el punto de vista de la orientación parcial, o sesgo, inconsciente.

¿Qué es la orientación parcial o sesgada?

“Si tienes un cerebro, tienes una orientación parcial o sesgada”, nos dice Christine Cox del Instituto de Neuroliderazgo. Más específicamente, los sesgos son elecciones inconscientes que todos hacemos todo el tiempo.[2]. Así que ¿cómo asegurarte de que cuando conoces a un candidato, serás capaz de tomar la decisión correcta y evitar distracciones de sesgos naturales que pueden llevarte equivocadamente a percibir cualidades en él o ella que de hecho no tiene? Por supuesto, el primer paso es ser consciente de que estos sesgos existen. De la lista de los muchos tipos de sesgos que existen, hemos seleccionado tres que te ayudarán a elegir a tus futuros franquiciatarios: confirmación, anclaje y miedo a perder.

Orientación parcial o sesgada por confirmación

Tu cerebro tiende a analizar la información relacionada con un candidato de manera a confirmar tus creencias preexistentes y a comprobar el resultado esperado de este análisis. Es más, si inicias el proceso de selección con la idea de que esta persona es un buen candidato, tu tendencia será la de pasar por alto las claves -focos rojos- que sugieren que no es compatible con tu marca de franquicias y en su lugar te enfocaras en todo lo que pruebe tu creencia inicial.

Orientación parcial o sesgada por anclaje

Un poco menos conocido, este tipo de sesgo puede llevarte derechito por el camino incorrecto al elegir a un candidato. Tu cerebro confía ampliamente en la primera pieza de información que recibe y la utiliza como base para juicios posteriores. Sí, ¡es la famosa primera impresión! ¡Y esta científicamente comprobada además! De hecho la primera impresión actúa como un ancla que, una vez lanzada, se volverá el punto central de la información creando así un sesgo que interpreta bajo la misma luz los datos subsecuentes.

Orientación parcial o sesgada por miedo a perder

Cuando estás seguro de que todo irá como esperas, tienes una menor tendencia a tomar decisiones riesgosas. Al mismo tiempo, si no estás tan seguro de tu éxito, tendrás tendencia a tomar riesgos para evitar perder. Por ejemplo, tu cerebro puede engañarte si tienes en curso planes de desarrollo de mercado importantes para tu red de franquicias y temes no poder encontrar suficientes franquiciatarios para llevarlos a cabo. En ese caso, los franquiciantes tienden más a correr el riesgo de aceptar a un candidato que no cumple plenamente con los requerimientos. En contraste, los franquiciantes que están seguros de poder atraer franquiciatarios fácilmente tienden a correr menos riesgos al momento de seleccionar nuevos franquiciatarios.

Los estudios demuestran que con solo saber que hay un estereotipo, aún si no estamos de acuerdo con el mismo, nos veremos afectados por él. Así es como funciona nuestro cerebro. Ser consciente de la parcialidad de nuestra orientación o de nuestros sesgos, es el primer paso hacia un mejor proceso de selección. Pero los sesgos no desaparecen, siguen ahí. Así que te sugerimos un pequeño truco: diseña tu cuestionario de entrevista de forma que te permita reducirlos y con ello disminuirás el riesgo de ser víctima de los estereotipos. ¡Tu red te lo agradecerá!

El equipo FlagFranchise

[1] A deeper dive into biais in recruiting, Neuroleadership institute, 2017.

[2] Ibid.